Encontré una flor con pétalos descoloridos, sus hojas algo secas y el olor ya casi perdido será porque le da mucho el sol o porque la descuido el jardinero; o será por que el amor en ella a desaparecido.
Al ver su tallo entendí que aún tenía vida y no dudé en acercarme y con una mirada oxigeno brindarle, con un beso en un pétalo casi despegado su corazón pálpito y al instante sentí como sus hojas floreciendo comenzaron.
El darle color a sus hojas para que así no muera una Rosa, ella tan bella y aunque marchita como el ave Fénix volvió a la vida, tan radiante, humilde y sencilla; me enamoró hasta su bella sonrisa.
Y es que como una flor eres mujer y así desde aquel día en que te conoci ví en ti una gran pasion, como una rosa que llena un jardín; así llenas tu en mi un gran amor.
HENRY RUIZ
13 DE JUNIO 2018