Continúan enseñando con su ejemplo,
maestras y maestros jubilados,
de miles de doctrinas son el templo,
por mi jamás quedaron olvidados.
Una visión del mundo me mostraban,
fui descubriendo cosas de la vida,
en que más aprendiera se empeñaban,
enseñanza selecta bien nutrida.
Deben ser orgullosos por sus hechos,
tantas generaciones conducidas,
por senderos tan rectos y derechos,
finiquitando causas bien habidas.
Aprendí las vocales por la tarde,
en un mes y semanas a escribir,
de ser un niño sabio ya hacia alarde,
me enseñaban la forma de vivir.
Maestros, y maestras jubiladas,
su legado perdura eternamente,
el presente refleja sus jornadas,
su fruto del trabajo permanente.
Gracias por sus servicios les dijeron,
mil palabras hoy son insuficientes,
sintetizando lo que tanto dieron,
con actitudes, fuertes y valientes.
Felicito a los profes jubilados,
por su grande legado en esta vida,
tantas generaciones que forjaron,
con ustedes están agradecidas.