Aquí estoy con algo que decir,
y sin etiquetas para ti,
sólo que a veces me da pena
haber nacido aquí,
esta ciudad tan bella
en la que sonriendo,
ilusoriamente pienso:
\"¡Ay, si aquí me hubiera
encontrado!\"
Como los niños,
pensando que una ciudad
es tu calle y uno sólo tu portal,
sonriendo como una cría
que se asoma al balcón
y cree que puede divisarte
con la facilidad con que lo hace
su alma prendida de ilusión.
¿Qué aspecto tendrá su barrio?
¿Qué olores impregnarán su ropa?
¿Dónde nacen las flores que van
naciendo por dónde pisa?
¿Y si corro? ¿Me dará tiempo
a escuchar de mañana
su voz de delicia?
Y llegar y estar tú sólo
y enfrente mi sonrisa,
decirte: ¿ves?, no es difícil,
sólo simple fantasía,
pero nací en Granada
y esa es mi dicha.
Porque ni veré tu calle,
ni sabré el suelo que pisas,
ni oleré tu ropa.
ni andaré con prisa,
me bastarán unas letras
para esbozar una sonrisa.
Tengo una bella ciudad,
tengo el corazón latiendo,
tengo mucha vida por delante
pero no te tengo a ti,
pues tengo un alma suicida.
Pilar Gonzalez Navarro.
Junio 2018