Amor sublime. Soneto
¿Es tu mano la que siento en mi pecho
comprobando si existen los latidos?
Para saber si aún no está deshecho
lo existente en corazón y sentidos.
Y tú vas comprobando que es un hecho
que hay temblores y un cúmulo de ruidos
y que no queda ni un tan solo trecho
que no guarde de amor suaves sonidos.
Es que mi corazón por ti bombea
la sangre en que navega mi pasión
y ya será muy ciego el que no vea
que en mis ojos destella la ilusión
y que el buen Dios entre los dos ya crea
amor sublime y sin disolución.