Eres el muérdago de la noche,
Que se refugia entre mis sábanas
Y me arrancas las mañanas
Confundiéndome los sesos
Te conviertes en mis piernas
Y con tus dedos vehementes
Haces que me sienta simplemente
Como si fuera un par de pechos
Eres solo una mera historia nocturna
Un cuento con mal final, es lo que eres,
caminas por la noche sembrando besos
Eres una planta que cuelga sobre mujeres
Y cuando te buscan... desapareces.
Yo Recordaré entre el llanto de mi cama
Que un día necesité un dulce abrazo
Pero desapareciste repentinamente por la mañana.
No te encuentro por ningún lado muérdago
No te encuentro de madrugada,
Y Por las noches te me apareces
Entre el eco de las sábanas.