Te he mirado en lontananza
Tan hermosa como un sol,
Tus mejillas de arrebol
Alentaban mi confianza;
Aún tenía la esperanza
De encender ese crisol,
De perder todo control
Y olvidar toda templanza;
Pero todo se ha perdido,
Encontré tanta frialdad,
Que casi perdí el sentido
Al descubrir la verdad:
Para ti soy sólo olvido,
Humo y muerte, nada más…