La dulce melodia de tu voz ya no dice mi nombre
Ahora llevas caminos en tu corazón
Caminos que se quedaron en el mío también
Los colibríes ya no están volando en la tempestad de los fuegos de nuestros dedos.
Tu sonrisa ya no es mía. Esa risa que me llevaba a la cima, ahora ya no me lleva a ninguna
Los volcanes de mi alma ansiosos por tocar tu cien
Ojos color sol, piel sabor a luna
La única que desea mi corazón para sanar este dolor que llevo dentro