Cuando pisé el material de la necesidad; pude ser poeta.
Esta es la grada del ensueño
a través de la memoria de muchos deseos.
Aquí no se encuentra segregada la mirada.
Desde esta loma;
pude ver apagarse el horizonte.
La llamada mancha gris,
es una pincelada a la resistencia.
Aquí los elementos van libres;
nacen y mueren a su manera.
Nadie me enseñó cómo hacerlo;
la praxis fue mi escuela.
El material de la necesidad
va con sus propias lógicas
materializando quimeras.
Siempre humildes
saludan a sus colectivos contentos;
dándole la espalda a los pesares.
Daniel Villarreal