Persigo en la mirada del sol
el recuerdo de tu rostro.
Tu rostro se desvaneció.
El sol de la mañana que abre una nueva zanja,me trae
recuerdos de bahareques, cerca de tablas, la mata de jazmín.
Después del mediodía, en lo alto las nubes, de puro algodón y un cielo azul
puro, la mirada del sol humedece mi rostro.