Corre, corre amiga que te alcanza la mancha
que me escondo detrás de falda de mi tía
porque esta calle no es tan ancha,
si me descuido, seguro que me pilla.
Allá va José, el corre como liebre,
¡Oh! me ha alcanzado y me grita ¡tú la llevas!
rápido a Julio toqué y de la mancha soy libre,
en este juego debes estar atento…tú la llevas!
Pasan las horas, así nos divertimos
todos los muchachos de este barrio querido
donde los amigos y vecinos compartimos
Amistades, experiencias y la inocencia que no olvido.
En muchos pueblos se disfruta de este mismo juego,
la mancha, la tenta, shuca y tú la llevas…tantos nombres,
recordaremos la alegría de estos momentos tiernos
aunque vamos creciendo y nos hacemos hombres.