Decías que me amabas y eran tan bellas tus palabras,
escuche tantas veces el juntos por siempre,
estaba cegada por cada una de tus mentiras,
Y yo que gritaba que eras todo lo que buscaba en un hombre.
Deje que hicieras de mi vida una falsa novela,
te creía cada caricia e incluso tus falsos besos,
que no me di cuenta que vivía una pesadilla,
estaba enamorada y éramos perfectos.
No escuchaba consejos la gente era mala lo decías,
jurabas una y otra vez que solo querían separarnos,
yo tonta te lo creía e ilusamente no distinguía tus mentiras,
me mirabas a los ojos y tiernamente me decías tu y yo nos amamos.
Decías que los golpes eran castigos por desobedecerte,
realmente lo merecía a mi familia se lo decía,
debes mentirles eres mi mujer y yo tonta tenía que complacerte,
fueron tantas noches frías viviendo en una constante agonía.
Fueron pasando los años y la vida era la misma,
un bebe venia en camino desearía una linda familia,
pero los golpes son duros y el alcohol era un amigo de mala fama,
tus mentiras salieron a relucir fingías una alegría.
Los días pasaban y tú a casa no llegabas,
fueron tantas las noches que trabajadas de más,
la cama era fría en ella ya no dormías,
que tenías a alguien me lo decían los demás.
Tontamente te creí que cambiarias, fingiste tan bien tu mentira,
confié en ti y triste fue la verdad que en mi cama un día otra mujer dormía,
fue la gota que derramo el vaso aunque demasiado tarde para tener cordura,
un mal golpe basto para que hoy tuviera que dormir en una tumba fría.