Mi infinita existencia se ha reducido a mis recuerdos, a cada uno de los momentos en los que estuve presente, cada época, cada mirada, cada beso, fui testigo de todas ellas. Por eso me siento a veces parte de todo aquello. Pero si de remontarme a mis inicios se trata, mis memorias se nublan cada que voy más atrás.
Desconozco de dónde vengo, o si tengo un final, de hecho a veces pienso que no soy real, que en lo que se basan mis ideas y mis sentimientos es inestable y efímero. Siento que toda la vida he existido, por lo que no sé si he existido siempre, o lo seguiré haciendo, no sé tampoco si siempre hubo vida, o si yo moriré cuando ésta llegue a su fin.
Odio que mi pasado y mi futuro sean inciertos, odio ser objeto de polaridades, de muertes, de sueños, de éxitos, de inicios y desenlaces. A veces sólo quisiera ser uno de ellos, quisiera estar del otro lado, no vivir por ellos sino vivir por vivir. Todos tienen conexiones entre sí, pero ninguno la tiene conmigo. Todos se preocupan por algunos, pero nadie lo hace por mí. Y todos viven, sé que yo también, pero no vivo por mí, vivo por ellos.
Creo que muchas cosas suceden por mí, tengo un gran poder, y sólo lo uso para ellos, creo que nunca me permitiré disfrutarlo, es difícil ser quien ve todo desde arriba, quien controla, quien da y quien quita, todos creen conocerte y saber de ti, pero nadie te comprende, y nadie se preocupa por ti, porque de hecho ninguno de ellos sabe que no fue mi elección.
Me he resignado a vivir siempre en mi monotonía, en hacer las cosas como de costumbre para no causar alteraciones. Siempre he sido constante, todos ellos son los que han cambiado, los conozco desde sus inicios, cambia su forma de verme, sentirme, percibirme, en pocas palabras, vivirme.
Pero... ¿Quién soy? He intentado resolver el enigma desde que tengo memoria. Soy la muestra del deseo de cada uno de ellos, lo que les da sentido, lo que les proporciona un poco de vida a su amarga vida mundana; pero eso sólo sería definir qué hago. Soy quien lo ve todo sin vivirlo, quien se contenta con ser él mismo pero queriendo ser algo más, soy algo incierto, pero no pasajero, porque en mí no existe el fin; pero eso sólo sería definir cómo pienso.
A veces creo que es una pregunta imposible, porque soy una combinación de tantas cosas que siento que ni yo lo sé, me gusta definir el quién soy por el cómo me llamo, y aunque corto y sencillo, me gusta mi nombre, me gusta ser Amor. A veces me gustaría tener algún apellido como ellos ¿Qué tal si tu nombre es mi apellido? Para acompañar lo que siento con el por quién lo siento. Sé que no puedo amar porque soy Amor, pero ahora que te conozco, creo que haré una excepción. A alguien más pertenece tu corazón, pero no importa, lo compartiremos los dos, porque si alguien puede amarte más que él, soy sólo yo, sólo el Amor.