MI ADOLESCENTE AMOR
Nueve lunas, una tras, otra, danzaban,
en el espacio sideral de las estrellas
y la noche se tornò en arreboles
fluorescentes.
Las làgrimas que en mis ojos se escondían,
escapaban, saltando de alegría,
por los recuerdos asidos en mi mente,
de tus súplicas de amor,
cuando eramos dos adolescentes.
Nuestros labios al unísono temblaban,
en busca de los besos palpitantes.
El rubor hasta el alma nos llegaba
y, de vibrantes cascabeles,
se inundaba el corazón...
No había otra dicha màs inmensa,
cuando por amor perdíamos la razón.
Hoy no estás conmigo...
Diferentes caminos construimos,
pero en mi corazòn
me queda la sensación,
de pensar, que tù aún me recuerdas,
con la misma intensidad
como lo hago yo
y añoras los instantes
de cuando felices
fuimos los dos...¡Tù y yo!
Felina