EdithElviracolquirojas

Cuando la pena

 

Cuando la pena anida en el alma

se siente muy cerca sus dagas cercenando nuestros sueños

cuando el dolor toca nuestros ojos

sentimos su lanzada profunda.


Ay, la pena hoy quiso dormirse entre mis huesos

sombrear mis pasos

y aniquilar mis sueños.


Yo mujer guerrera indomable

No he podido con ella.

Me vence son sus halcones del miedo

con sus constantes malestares.

¡Estoy exhausta!

Alcánceme un vaso con agua:

tengo sed de amor,

sed de paz,

sed de descanso.

Hastío.


Mi pena solo yo la vivo y conozco

solo a mí me carcome el alma.

El monstruo de la enfermedad

me envuelve con sus fauces hambrientas.

Yo en mi lecho frío

le combato pero me vence

me tira contra el suelo, se ríe de mí.

¡Se agigantan sus espolones en mi cuarto!

Y me traga el pozo profundo de la desesperación y el desconsuelo:

Lloro.

Rezo

y vuelvo a llorar.

¿Cuando acabarán estos colores del  calvario a dónde yo no quise venir?

Busco un banco de descanso para mi pena.


Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados