!No era verdad
que fuesen de ese modo!
Solo tal vez.
Era un corrillo;
Las mujeres pensaban
en otros cantos.
Sus esbelteces
tropezaban miradas
en Primavera.
Y en raudos vuelos
sus admirables cuerpos
eran perfectos.
!Qué hermosas plantas!
Para el verano hermoso
habían nacido.
!Era verdad!
Solo en esa estación
crecen solemnes.