Quizás no tuve tiempo de buscarte,
Convertido en humo,
Cuando fuiste fuego,
Pero sí lo tuve de perderme.
Porque en noches como está,
Me gustaría perderme entre sus brazos,
Jamás resistiré a los latigazos,
Que hacen de mis letras una amarga angustia.
Te dije que tuve tiempo de perderme,
Ahora te toca buscarme bajo tu respiración,
Y convierte este juego,
En el hambre del mejor.
Porque no, no estoy mejor dormido,
Como siempre pensaste,
Como a veces pienso.
Creo que no,
No usaré mis ojos como escudo,
Cuando más lo necesito.
Solo espero que me encuentres,
O que me encuentren,
Aquellos, que sabiendo lo mal que amas,
Seguirán diciendo que eres perfecta,
Aum quemando el corazón que quemas.