Miro a mi horizonte
sonrío al atardecer
y siento el frío correr.
Tu te llevas mi vida en un suspiro,
en esas olas de esperanza y amor.
Navegas,
Me llevas,
pero te secas...
Poco a poco me cubres
con el dulce manto de la muerte
al alejarte de mi camino.
¡Cara blanca como la espuma,
alma transparente y cristalina!
Sacia mi sed con dulces caricias.
Moja mi rostro con dulces melodías.
Llévame contigo para que no me quede a solas.