Cada día más convencido de que el universo no tiene fin
de que hay astros vivos y muertos infinitos
de que no hay cielos e infiernos malditos
y vivímos en el único y maravilloso jardín.
Nadie para vivir aquí tiene más méritos
todos salimos del vientre de la madre desnudos
gracias a las primeras canciones de cuna no somos mudos
para ser felices no hay que ser ricos ni tener débitos.
Nada más serio fuera de la muralla que un cementério
dar un paseo extramuros no es reconmendáble
los altos cipreses, el aire quieto no es encomiáble
lo más parecido al más allá es el monasterio.
Vivímos pos haber sido afortunados con esta lotería
unos dioses desconocidos crearon este sorteo
nosotros pasamos por la vida dando un rodeo
y cuando se termine, saludaremos a un nuevo día.