La salvación solo es un pretexto, tras la evolución de los hechos no aprendidos por los cobardes, puesto que un hombre valiente solo crece con las derrotas superadas y lo aprendido por cuenta propia.
Así que deja que pase el tiempo y aquello que tenga que a contender, mira lo natural y disfruta de lo simple de la vida, sonríele al amor y se honesto ante Dios.
Por qué solo somos humanos destinados a ser felices.