Y aquí estamos tu yo
Juntos en un laberinto sin salida
En lo oscuro de la noche busco tu rostro
A lo lejos veo una luz que brilla con fuerza
Me acerco y descubro tus ojos grises en ella
Suspiro y siento miedo de no tenerte nunca junto a mí.
Y aquí estamos tu y yo
Mi alma arde y mi cuerpo en silencio
Ruega por ti
Abrazaría al diablo por escuchar un te amo de tu voz
¡Que este amor sea mi condena y que el calor de tu cuerpo
sea el infierno donde aguarda mi prisión!
Inocencia Maligna