pani

EN HONOR DE VIVALDI, Y SU MARAVILLOSO CONCIERTO PARA VIOLÍN, R.V. 356...

 

Tu música

me deja exhausto...

de ternura desbocada,

 

deshojando

de avaricia

mi tristeza...

 

deslazando

de belleza

mi ventura,

 

en la tarde...

desnudada por su gracia.