Y, digo yo… ¿qué le parece?
Si me regala una tarde en el parque
Y me deja compararle un helado del sabor que ame
Y me deja mirarla con una mirada que llame
Mis mejores sentimientos y embarque
Los besos más tiernos que merece…
Y me deja convidarle de mi paleta de hielo
De chocolate con pasas y nueces
Y camina conmigo hasta la fuente del centro
Y ahí me acepta el suspiro violento
Con que me atraganto dos veces
Antes de contarle mi anhelo…
Y de regreso hasta su casa (o la mía)
Usted camina contando estrellas del cielo
Recargada en mi hombro, confiada
Pero yo no le digo más nada
Solo enredo mis dedos en su pelo
Y acaricio su mano que tirita
Y antes de llegar, me deja que la bese
Bebiendo de sus labios chocolate y ternura
Y usted me traga con la claridad de su mirada
Pero, aunque se sorprenda, no dice nada
Y perdona mi arrebato con dulzura
No sé, digo yo… ¿qué le parece?...