angelillo201

Resucitar en Teruel es no vivir, y en Vall d´Uixó sufrir.

Introducción.

El siguiente poema esta basado en hechos reales, transcurre por el manantial  de la Escaruela, en Sarrión,  y por la rivera del río Mijares. Las huellas de la naturaleza de ese lugar abandonado y lleno de armonía se unen íntimamente a  la renuncia a la vida de dos desempleados de Vall d´ Uixó que han ido a pasar la ITV a Teruel . Aprovechan la ocasión para dar un inhabitual paseo lejos de Vall d´uixó, ambos desgraciados, fuera de su ecosistema habitual,  sienten una profunda desolación por sus vidas que una vez amaron, y que han perdido al quedar excluidos primero trabajo y ahora ya del mundo que vuelve a surgir ante ello como un lugar hermoso. Para no enloquecer de tristeza y melancolía por toda la vida que se han perdido estos años, y tener que cambiar el rumbo de sus vidas ,deciden volver a Vall d´ Uixó a seguir con su triste existencia lo peor que puedan. Allí, una lluvia de petardos, gritos, anuncios de la alcaldesa, y discusiones de borrachos y drogadictos, les dará animo para mal vivir un poco más en un paisaje , patrimonio  y sociedad, que los valleros y valleras están consiguiendo llevar hasta sus últimas consecuencia: la extinción.

*****

 

Era tarde para renacer en un ocaso en Teruel.

Volver a vivir ¿ para qué?

Era un alegre revivir caminar por la rivera del río Mijares.

A cada paso, el intimo dolor de la nostalgia por el tiempo perdido, parados.

Y un deseo de irnos cuanto antes de Teruel, a Vall d´ Uixó a sufrir.

A nuestro paso, río abajo, el alegre canto de los mirlos acuáticos, la garza real, algún pato, los pica pica pinos.

La yedra entre los chopos, las encinas y los olmos.

 En el recodo del sendero de nuestro camino, en medio de la nada, aparece una vieja casa cubierta de naturaleza con la puerta abierta.

Oímos la voz de un niño dentro , nos detenemos contemplando la casa completamente abandonada.

Una voz desde la casa dice que no pasemos, cuando llegamos  a la puerta.

 

En el cielo una señal luminosa nos indica el camino hacia el mar  que debemos emprender.

 

(Yo, a Antonio)

¿ has visto Antonio los límites que tenemos?-

Antonio.

Hacia mucho tiempo que no salía de Vall d´Uixó. Para mi , hacer esto que hacemos hoy de pasear en la naturaleza, y ver sitios como este , era habitual.

Yo .

Ya no hay solución para nosotros, nuestra vida ha enraizado en un lugar marchito, como la muerte que se hunde en la tierra. estamos condenados al hastío  en Vall d´Uixó. Solo la muerte nos puede librar.

(Giramos y nos vamos por donde hemos venido.  No podemos resistir más sin lamentarnos por estar a gusto en un lugar. Antonio vuelve la cabeza, y contempla los últimos rayos de sol cayendo sobre el río que forma sombras blancas y azuladas que se hunden en el agua envueltas en un torbellino de mariposas amarillas. Una lágrima resbala de sus ojos y cae amarga hasta el centro de la tierra)

Yo.

No mires atrás Antonio que es peor, acepta un horizonte sin esperanza. Se fuerte, volvemos a casa. 

Antonio.

Bien Ángel, bien.

Una urraca camina con nosotros y nos pregunta

 ¿ a dónde vamos ?

Yo a la urraca.

A Vall d´Uixo ¿ te vienes?

La urraca levanta el vuelo cantando

No gracias me quedo en Teruel hasta que venga alguien de Ibiza.

Angelillo de Uixó.