Con una voz roncona, se despertó, salió al vestíbulo y vio que la puerta del cuarto de su hijo estaba abierta, y el ya no estaba en la cama.
Que bien se dijo a sí misma por fin puso el despertador y ya se levantó.
Cuando bajó no había ningún rastro de que había tomado desayuno, que raro ahí vio que la puerta de la cocina estaba forzada y tuvo las primeras horas más inquietas de su vida.
Su hijo podía haber sido raptado?, Lo primero que pensó fue en llamar a su ex-esposo sabía que había salido de la cárcel hacía poco,sería el responsable...No lograba atinar una idea coherente en su cabeza. Llamó a una de sus vecinas para ver si había sentido algo en la noche.
Susana, - no oí nada anoche pero avisa a la policía todo esto es muy raro, Caramba, dejaría todo en manos de quien?, sabía que su hijo ya era grande y quizás se había ido con su papá con su consentimiento y temía poner todo al revés en su contra. Por que no darle una oportunidad, después de todo, el estuvo preso, pero no por ser ningún asesino, si no un estafador y tonto...
Sonó el teléfono y corrió era su hijo que le dijo que estaba a punto de partir en el aeropuerto con su padre que le propuso una vacaciones de una semana, que regresaría que no quiso despertarla, su voz parecía distendida, le dijo que estuviera tranquila que tenía ganas de estar con su papá que hacía tiempo que no estaba con él.
Ella le dijo que no fue la mejor manera de enterarse, pero que si el estaba de acuerdo, que estaría bien que compartieran tiempo juntos.
La mañana fría y lluviosa hizo que se abrigara más de lo habitual y saliera a su trabajo pero igualmente estaba preocupada.
Cuando llegó a la oficina le comentó a su compañera lo sucedido y ella le dijo que si estaba loca, que como había permitido tal cosa, que no estaba bien de la cabeza, que le tendría que haber obligado a volver o al menos hablar con su ex-marido y que le rindiera cuentas.
Si es verdad,- no se lo que me ocurre últimamamente no tengo capacidad de reacción, pero ya era tarde.
Recordó al hombre que era Damián que era incapaz de hacerle daño a su hijo, pero una angustia le rompió en el pecho y se largó en llanto.
Siguió ordenando unos papeles y llamó a su hijo, el le dijo que su papá le había comprado un helado de chocolate y estaba hablando con una gente que no conocía .
Le dijo que quería hablar con su papá , la señal se corta, vuelve a llamar y le pone un emoticon de un avión. Ya vuelve a llamar y atiende él, le pide disculpas de su manera de obrar pero que solo será una semana que tiene para su hijo y que lo cuidará bien.
Ella se despierta, ve que todavía no amaneció se levanta al baño y ve a su hijo durmiendo en su cama.