**Quisiera ser un pez**
Una espera
en la orilla del rió,
unos pies mojados
bajo el sol,
pero las frías aguas
la causan dolor,
unos ojos mirando
su caudal fuerte,
ensimismada
entre helechos verdes,
tarde de incertidumbre
de rabia y de celos
por ese amor que no llegó,
entre las piedras brillantes
chasquea el agua,
llevándose la corriente
su esperanza,
quisiera ser pez
y no tener memoria,
para sacar de su pecho
a quien le prometió la gloria,
llega la noche
y camina descalza,
entre dos luces
retornando despacio
con la cabeza gacha
haciéndose cruces,
sintiendo en su cuerpo
un frío de escarcha,
por el que no volvió.
Y hasta el abismo la hundió..
Elena ©