Verano Brisas

HIPATIA

La estrujaron y rompieron sus vestidos,

la desollaron, arrancándole la carne

con afiladas conchas marinas;

sus restos fueron quemados

y sus obras destruidas.

 

Cuánta gloria la cubre todavía

sólo pueden decirlo los infolios,

mientras haya una chusma enfurecida,

densas nubes de incienso y un Cirilo.