Alma atormentada

Gaditana, pienso en ti (Rima LXVI)

Me conociste en

Horas bajas,

No era el mejor día

Para romper la baraja,

El cansancio me hirió

Como una navaja,

Me deje manipular,

Por el lerdo zarandaja.

 

Siento haberte

Conocido,

La mala suerte

Me acompaña,

Tenía el cerebro

Cocido,

No sabía que iba

Con un manipulador

Con saña.