Francisco 1987

Al fin

al fin somos dos
luchando por el mismo fin
porque las ratas no esperan
y los cohetes revientan
en las orillas de la ciudad
no temas de tus instintos
no temas de tus sentimientos
por las calles iluminadas
se siente el latir de tu volcan
amnistiado, poco burocratico
legislativo, redentor