La revolución comienza desde tu mirada,
Palpitante de rebeldía obstinada,
Impregnada de sabiduría acentuada,
Del colmo de los días y las mañanas.
Surcando mentes y paisajes,
Recorriendo mares y bagajes,
Del cuerpo y la mente,
Orillada y reprimida por los salvajes.
Olvidada desde la crisis,
Allí esta tu mirada,
Colmada de bendiciones y purezas,
Aislada como último recurso humano.
Mirada que recorre el mundo entero,
Qué llena los corazones erráticos,
Qué convence a los escépticos,
Qué hace dudar a los files.
Bosque de mares y acetonas,
Volcanes rugiendo fuego,
Murmullos de silencio,
Tu mirada haciendo eco en los corazones.
Se presenta en todas formas,
Cómo revoluciones o entidades,
Cómo milagro y tesoros,
Desde el cielo y lo profundo.
Tu mirada como el todo de mi alma...!