La pasión
llevaba
esa noche oscura
el alma desgraciada
empuñando una daga.
Un viento fuerte
soplaba del poniente
embolsando la esquina
…….
nada pasaba
solo
basuras y desechos
volando
como fantasmas
a la pobre luz del farol.
El infinito dolor
ese odio y rencor
miraban
el filo de la esquina
esperando ver
la figura tan odiada
de quién robara
el amor de su vida.
Ya perdió todo
qué le queda ahora
solo ese vacío inmenso
ese cielo negro
solo iluminado
por el brillo siniestro de la daga
……….
disparada
con la fuerza
la destreza que no tuvo
no supo
……….
y todo lo perdió
definitivamente
en esa esquina
en sombras
solo iluminada
por la daga
ensangrentada
clavada
en su propio corazón.