La quise, no se si ella me quiso,
recuerdos sus ojos oscuros,
su piel clara, su sonrisa afable;
los momentos que compartimos
fueron los mejores de mis peores años.
Como sueño con tenerla entre mis brazos,
bajo la luz de la noche oscura
acurrucar mi ser en su matriz.
Recuerdo una que otra lagrima
brotar de aquellos ojos negros,
casi siempre reía
con la gracia de las flores
de una mañana de verano.