Observando,
oyendo,
oyendo y observando,
como se mueve y avanza un poema
en medio de un quebranto
y una quietud abierta,
desolada
silencio inmediato
que se apodera
de una línea
que cuenta sin contar
la compresión de los sentimientos
fidelidad distinta
auxilio de la monotonía
mimetiza mi pensar
a veces sueño
que me expando
está vez
el lenguaje
no me salva
puesto que tratamos
de la vida
pero coincide
con el fluvial de mi río interno
ya no se trata del acto
el lenguaje es el acto
y ahora
yo
soy el poema
después de la mediación del pensar
pero sin caer en su red,
encendido
en la brasa
todavía viva.