zaira Nadin

Mi Niño

Como suave capullo te iniciaste a la vida, te hice nido en mi vientre anunciando tu estadia.

Mis ojos se iluminaron con luz nueva, observando el camino que habrias de transitar.

Transformose mi cuerpo, y fue la maravilla; se colmaron mis pechos con la miel de tu alimento.

Contaba los dias para mecerte en mis brazos, rozarte las mejillas y aspirar de tu aroma.

Si alguna vez una lagrima lastimo mis mañanas, me volviste roble que soporta los vientos y llegaste al fin para gozo de mi alma, transformandome en angel custodio de tus pasos.

Tu risa cristalina inundo de dicha los rincones mas ocultos de mi alma femenina.

Creciste tan rapido, como una mariposa, que primero es oruga y luego despliega majestuosa su bella transparencia. Pasos timidos fueron los primeros, tornaronse seguros hasta llegar a tu presente.

Te tengo ante mis ojos erguido y orgulloso, tierno y responsable. Mi niño-hombre, hijo mio, no hay palabras que contengan exactas mi cariño.

Solo atino a decirte que te amo que por ti camino orgullosa por la vida.

Que estoy aqui dispuesta a dar mi sangre gota a gota si la vida o Dios lo reclamara.

Que no hay dia que no eleve una plegaria por tu dicha que es la mia, hijo mio, vida mia.