Tú eres la culpable
de esa noche que me falta
en el recuento de mis días
porque te fuiste una tarde
sin una despedida
Quedó la cena servida
unas flores encendidas
y unas canciones perdidas
en medio de la habitación
junto a dos sillas vacías
Yo tenía la ilusión
de la noche del adiós...
En tu mundo no cabía
esos detalles sensibles
eras todo un arrebato
de urgencias y correrías
Y esa noche envuelto
entre las sábanas frías
soñé que ella no existía
que esa imagen de mis sueños
que esa noche de mi vida
sólo fue una fantasía