Danzando por la rivera
del río de la alegría
y con colores que brillan
desciende la primavera.
Viene cargada de aromas
que a su paso va dejando,
mientras recorre cantando
las llanuras y las lomas.
Trae adornadas sus ropas
con matices de esmeralda
y una corona de guirnaldas
de jazmines, lirios y rosas.
La primavera ha traído
enredada entre sus faldas,
mil libélulas doradas
para adornar el río.
Mariposas encantadas
que juegan entre las flores
y cantos de ruiseñores
para endulzar la mañana.
Pinto el suelo de esperanza
alegro los días con canción,
de ensueños y de ilusión
vistió el alma enamorada.
Va dejando en su danzar
un sendero de colores
y a los vientos con olores
los envuelve al pasar.
Aun se siente el aroma
de la hermosa primavera
que se fue por la ladera,
mientras el verano asoma.
Mima Figueroa.