Te escribo como siempre…
con toda mi mente pensándote,
con todo mi corazón sintiéndote,
con toda mi vida viviéndote.
Te escribo porque te añoro,
en la medida que soy consciente
de lo mucho que te quiero,
en la total dimensión de este amor.
Que tiene vida por si mismo
y necesita de mi para expresarse…
como yo necesito de ti para sentirlo,
decírtelo y escribírtelo día con día.
No importa el tiempo; si es noche o es día;
si copiosa la lluvia cae o todo es estío...
basta con besar un recuerdo tuyo,
y la primavera se encarna en mis labios.
Este amor se me sale por las manos,
como agua febril; escribirte palabras
que debieran ser tibias caricias,
que me hagan oler tu cercanía.
Sentir que solo tu suave piel,
me separa de la belleza de tu alma…
Esa alma a que llamo en cada madrugada,
esencia y perfume de la mujer que amo…
Si… te escribo todo esto...
no sabes lo bello que es sentirlo por ti...
sería más bello si tocara tu alma,
si la hicieras el perpetuo nido de mi amor.
Donde cada mañana lleguen mis cartas;
contándote como te amo en mis amaneceres y ocasos.
Con la tinta imborrable de mi corazón...
con mi amor que es tuyo mas que mío.