La noche se ha quebrado rugiendo la pena de tu olvido.
Mi alma cruje estrepitosamente al saber que ya no eres mío.
Mi corazón se desvanece en quietos y penosos latidos.
Adormecida mi existencia ya no siente tu presencia en el infinito.
Tu amor, ecos del pasado, quedo atrapado en los hilos mal tejidos de nuestra memoria.
El universo se ha silenciado,la eternidad se detuvo en unos de mis suspiros.
Todo esta quieto hasta el mismo agitado inmenso vacío.
Todo esta perdido, ya todo se ha desvanecido.