Extraña.
Así, extraña, desnuda y sin ser más que una mujer sin prejuicios y dones.,
Tras la ventana de su vida pasaba el desfile de los amores que la dañaron,
Las caricias y sudores de los amantes que jugaron con su cuerpo, en su piel,
Sin pensar más, se bañó, dejó en el desagüe de su pasado esos fantasmas,
Dejó atrás los ojos de los que la vieron un día así desnuda igual sin o con,
Sin la misma mirada de amor que la descifraba pero con esa rabia de ayer,
Antes una mujer embebida en amores, flores, luces brillantes como ella,
Ahora una gran sombra la cubre por no dejar ver su verdad ante esos feos,
Esos monstruos que sólo comen y se van como perros hambrientos del dolor,
Y así enigmática vive en su conciente real.