Qué razón tenía Quico
En el “Chavo del Ocho”,
La chusma aparece,
Y de repente
Todo lo ensombrece,
Aquel pesado
Seguía en sus trece,
Vaya “colega”,
Ayudar no le apetece,
No me simpatiza,
El se lo merece,
Por no decirle:
“Ay ya cállate
Cállate ya,
Que me desesperas”,
Mi cerebro enloquece,
El no dormir
Desfallece,
Por ayudar al mequetrefe,
En vez de a ti,
No hay quien
Me enderece,
Mi ser
Se desvanece,
Dejarte triste
No me enorgullece,
Ríe chiquilla Gaditana,
Es lo que acontece.