Con la fuerza de las olas
sus versos me han seducido,
y a su encanto se han rendido
las hermosas amapolas.
Es canto de barcarolas
flotando en el aire leve,
como pétalos de nieve
de un paraíso encantado
que en sus almas ha brotado,
y a la mía la conmueve.
Dedicado a D. Leire y M. Isabel