Jose Luis Morales

BREVE HISTORIA DE AMORES

 

Entre tantas mujeres que me usaron,

y otras tantas que tal vez me despreciaron, 

hubo algunas, quizá, que me quisieron. 

Pero sé que muy pocas me olvidaron.

 

No dudo que tal vez algunas de ellas

me odiaron después de haberme amado.

Pero ese odio tan sólo se habría dado

por no haber atendido sus querellas.

 

De belleza, si mal no lo recuerdo,

todas ellas tuvieron buena dosis.

Algunas, les juro, no exagero,

fueron de la belleza la apoteosis.

 

Mas, entre todas, hubo cuatro damas

con las que he compartido muchas cosas.

Entre ellas, cuatro hijos, cuatro camas

y experiencias la mar de dolorosas.

 

La primera fue vana y fugitiva

huyó en busca de cosas, no de amor.

Me usó como un bote a la deriva

y navegó hasta su puerto de dolor.

 

La segunda fue buena y sensitiva,

madre excelsa, maestra sin igual.

Y al agotarse su paciencia esquiva

se agotó también su gusto marital.

 

La tercera fue el diablo disfrazado

de excitante doncella virginal.

De todas las serpientes que han reptado,

fue quizá su veneno el más letal.

 

La cuarta fue tan sólo titubeante,

atrapada entre querer y no querer.

Un día tomó la senda del atlante

para que nunca la volviera a ver.

 

Pero la vida por suerte deparó

que una quinta mujer esté a mi lado.

Una mujer de quien vivo enamorado.

Y todo lo anterior… se me olvidó.

 

©Luis Morales

Marzo 19 de 2016.