Tu voz pasaba,
De grave a aguda,
En mi cerebro
Causaba locura,
Tus ondas sonoras
Eran dulce frescura,
Un sonido
Que desprendía ternura,
Para mis oídos,
Suave tersura,
Una agradable
Partitura;
Ahora solo te deseo,
La mejor buenaventura.
Para un día que salgo
De la fragua,
Viene Adonis
A molestar,
El cansancio no
Me dio tregua,
Diosa Artemisa
Te deje escapar.