Es purpúrea gema tu amor bendito
azul celeste, un cielo prometido
esperanza jovial en el camino
entre lo terrenal y lo divino;
tú, bálsamo, perfume en el olivo
tu imagen escondida en el río,
un rayo iridiscente en el olvido
creí morir desahuciado, hoy vivo
entre lo terrenal y lo divino.
Esencia de mi poesía, ser místico
brotas verso de mi alma, infinito
anidas golondrina soy tu nido,
ciernes en mi vida, amor, destino
entre lo terrenal y lo divino.
Toca suave mi hombro la inspiración
un sentimiento, un madrigal de amor
inunda un diluvio mi corazón
entre lo terrenal y lo divino;
todo es radiante, pastizales verdes
a tu encuentro van hermosos claveles,
adornan tu frente mil y un laureles
creas con mirarme tan bellos paisajes.
Entre lo terrenal y lo divino
eres tú aquella voz en el silencio,
del tiempo, aro de fin y principio,
lluvia, sol, día, noche, mi ilusión,
poesía, música, arte, resplandor.
Tomas entre tus manos un suspiro
lo conviertes en lunas, lo he visto
esa magia me tiene confundido,
bésame despacio es permitido
aunque tú estés ausente no te olvido
entre lo terrenal y lo divino.