Es la hora oscura donde despierta mi locura y se adormece mi razón.
La oscuridad me llama con seductora voz, gira como un torbellino todo alrededor.
Su risa burlona como inmensas cadenas son, su prisionera soy.
El grito desesperado queda atrapado en mis entumecidos labios,
que yacen inertes, estériles de palabras de amor.
¡Oh el amor que tantas veces me libero! ¡Oh el amor que tantas veces me tracicionó!
Fuerza sin materia, invisible y monstruosa que subyugas todo mi ser.
Poderosa fuerza que no puedo resistir, posesivo amante \"tus besos de muerte lenta son\"
Puedo ver el abismo de locura a mis pies, es tentador ceder, no luchar, dejarme ir.
¡Que me detiene, por qué seguir? Si el dolor es tan grande como el odio y el temor hacia ti.
Alfonsina te conoció, y prefirió navegar las profundidades del mar, yo solo quiero los claros cielos surcar.
¡No mas dolor, no mas ilusión, no mas desencantos, ser simplemente y únicamente yo.
¡Noooo, detente! ¡Yo te puedo vencer! nací con el escudo de la esperanza,
la espada de la razón y la flecha de la rima y la dulce canción.
Con m escudo te detendré, con mi espada las cadenas romperé y con las flechas de mi poesía te destruiré.