Francisco tu eres la lluvia
En la aridez de la patria.
Eres la voz que armoniza
El perdón con la venganza.
Francisco eres más joven
Que un capullo que se alza
En medio de los abrojos
Que es este mundo sin alma.
Eres aroma que brota
De una vasija sagrada
Eres blanco y eres negro
Eres indio, eres mulato
Eres aire que da vida
Eres la sangre del alma
Eres la voz consentida
Que Dios permitió,
cual dádiva,
Tan escasa y tan ansiada
Francisco tu eres humano
Pero un humano que abraza
Sin considerar valores
De sólo humana prestancia.
Eres puro corazón
Pero corazón con ganas
De cobijar con cariño,
A toda la raza humana.
Eres saludo de amor,
Un saludo sin nostalgia
Un saludo que se queda
Eternamente en el alma.