No había visto nada tan hermoso en mi vida como aquel girasol junto al asfalto de la autovía AP7 . Los coches pasaban a toda velocidad junto a él en dirección a Tarragona, y en ese punto, el pueblo de Vall d´Uixó, formaba en el horizonte una mera sombra de casitas blancas, que se desvanecía alrededor de cúpulas redondas y azules de viejas iglesias hundidas bajo sus secas montañas, cuyas cumbres coronaba implacablemente el Sol. Paré la bicicleta. la dejé en medio de la vía de servicio ,acercándome todo lo que pude al girasol. Quedé extasiado, guardando silencio vi los movimientos estáticos de aquel girasol ! brillaba con tal llamarada! -que eclipsaba los colores del cielo apagando al mismo sol. El fulgor de sus pétalos, y su alegre forma, me hicieron llorar de optimismo.
Una oleada de sonidos de motores cruzó ese espacio baldío de la autovía AP7 . A mi lado estaba el silencioso polígono industrial de Vall d´Uixo que había colonizada esa parte del valle hasta destruirlo completamente.
Hasta ese momento , yo creía que todo lo feo, bajo, y despreciable de Vall d´Uixó me pertenecía . El horror, el sufrimiento, la impotencia había sida creada para ensalzar mi vida. EL viento solar, el deseo, la alegría, estaba reservada para la gente de ese otro mundo que me rodeaba, y al que yo no pertenecía. Esta sociedad que me negaba, me empujaba a la porquería. Estaba tan pegado a ella que otra cosa no veía. Amputado del amor a la vida para ser arrojado al más hondo desprecio y deshumanización de mis semejantes, vagaba sin rumbo como el que encuentra a Cristo y se pierde para siempre. Ningún tipo de adaptación humana es sostenible para que el se ha hundido tanto en la mierda como yo. En la tierra baldía, metido en una trinchera de carne excavada vall d´uixo, la que acecha, ataca, consume. Cada día, cada hora, cada segundo de una vida en Vall d´Uixó , un cuerpo sin nada que hacer se debilita. Mi sombra eterna retrocedió unos centímetros y pude ver más allá del dolor y de la alegría la nada sembrada con un girasol. La nada es siempre colonizada e invadida por la vida, con esa luz me fui pensando en Loli.
Angelillo de Uixó. Al paisaje y la voluntad.