Esta noche me encantò ,
tus palabras se deslizaban en
mi cuerpo , igual que tus labios ,
que me provocaban las màs
exquisitas sensaciones que
sabemos disfrutar los hombres .
Y asì mis labios te recorrieron ,
todas las veredas de tu figura ,
que danzaba al rìtmo de mis besos .
Tus piernas levantabas para que mi
vista se deleitara de toda tu sensualidad ,
la cual me llamaba , para que le dejara mis
manos , con la ternura de la calma .
Que noche màs hermosa , los juegos
fueron ilimitados y asì las risas , que
hacìan coro con las burbujas de la
champaña .
La piel era un tesoro que nos envolvìa ,
en interminables encuentros de puro placer.