Carlos Dguez

Se acerca la noche

Cuando las sombras del ocaso

asomen a nuestro huerto,

es que nuestro amor ha muerto

porque lo mató el fracaso.  

 

Y si acaso alguna vez

tu memoria me recuerda,

no permitas que te muerda

el halo de tu altivez.  

 

Vagaremos por la vida

yo con otra, tú con otro,

y voltearemos el rostro

con la mirada perdida.  

 

Dirás tal vez que fui un necio

porque me diste a elegir

una vereda a seguir...

y no quise pagar el precio.  

 

Tu corazón es muy noble

por eso quizá no entiendo

cómo es que fuiste metiendo

la daga con saña innoble.  

 

En fin, se acerca la noche

y con ella un negro manto,

no podré secar tu llanto

ni escucharás mi reproche.