Enrique del Nilo

VOLAR

 

 

 

La invité  a volar

pero había olvidado que tenía alas;

y su temor me preguntó:

- Y si me estrello en la sima

- recogeré tus pedazos,

para traerte a la colina

y te empujaré hasta que recuerdes el vuelo;

pero en verdad yo saltaría primero

y si fallaba…

sería el colchón para soportar su caída

 

mas cerró sus ojos

abandonó el aprisco

y volvió a su jaula

donde se sentía segura