Un recuerdo en forma de lluvia melancólica.
La luna roja cubierta por lágrimas de vírgenes.
Dos espadas clavadas en la playa sangrienta.
Un brillo esparcido en la arena por tu luz y sombras.
Choque de crepúsculos en las alas de tus ojos.
Esa lluvia que nos baña y reluce nuestros pecados.
Nos abrazamos al deseo de morir juntos
clavados por las espadas, ser sangre; agua de mar.
Un recuerdo de tus lágrimas mojando el cielo.
Resplandecen juntito a las estrellas, tiritan de frío.
Te fuiste a otro mar y me dejaste anclado
en la arena roja cantando canciones que lloran.
Un recuerdo en forma de besos de fuego
eclipses formados por nuestras lenguas valientes.
En esa arena roja quedó un trozo de tu sombra
rasgando la poca luz de mi corazón.
Un recuerdo viene en las noches de sueños húmedos
con tu paso ardiente y las raíces de tu vientre.
Me lleva a esa playa de algas que queman,
a esa arena de estrellas y lágrimas
donde con miedo me supiste amar.